Por Graciela M Fernández
Un proyecto que surgió en plena cuarentena por Covid19. Marina, tiene más de cincuenta y decidió emprender un negocio muy dulce, fabricar alfajores caseros y comercializarlos.
Hace rato que tenía ganas de empezar a hacerlos, pero esperó el momento oportuno hasta .que pudo conseguir la receta que la convenciera, tenían que quedar muy sabrosos y lo logró, uno de los secretos es que utiliza productos naturales y muy frescos, como huevos, naranjas, dulce de leche, manteca de primera calidad.
En el barrio de Banfield, en su propia casa, nació Alfadolce, hechos con amor y pasión por las cosas ricas.
El negocio se va expandiendo y ya no alcanzan las manos, pronto necesitará muchas más.
Un proyecto que surgió en plena cuarentena por Covid19. Marina, tiene más de cincuenta y decidió emprender un negocio muy dulce, fabricar alfajores caseros y comercializarlos.
Hace rato que tenía ganas de empezar a hacerlos, pero esperó el momento oportuno hasta .que pudo conseguir la receta que la convenciera, tenían que quedar muy sabrosos y lo logró, uno de los secretos es que utiliza productos naturales y muy frescos, como huevos, naranjas, dulce de leche, manteca de primera calidad.
En el barrio de Banfield, en su propia casa, nació Alfadolce, hechos con amor y pasión por las cosas ricas.
El negocio se va expandiendo y ya no alcanzan las manos, pronto necesitará muchas más.
https://www.instagram.com/p/CClQVOsnye0/?igshid=1j3ckvzi95vri
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